La maestra astuta y temperamental le dejó en claro a la alumna que no podría pasar la prueba, y elementalmente colocó a esta ingenua latina sobre la mesa justo en la audiencia. No le costó nada convencer a la bobalicona de que no respondía del todo a la pregunta, y la novilla se dio cuenta de que no le daría la espalda a esta famosa tentadora de las mejores novillas del curso. Sin más preámbulos, cerró la puerta xxxdeancianas del auditorio y acercó su bragueta a la cara de su pupilo. Ella no se sorprendió y soltó su impresionante serpiente. Lo que pasó después fue cuestión de técnica, pues el miembro ya estaba en juego.
